YO CREO (La Fe y La Obediencia) J. Reina

YO CREO (la Fe y la Obediencia)

Conformismo

J. Reina

Quiero empezar esta temática con un ejemplo:

Si tiene cualquier manual de instrucciones o guía para algún aparato, sácalo.

¿Qué es?

¿De qué sirve?

¿Cómo se usa?

¿Qué secciones o partes contiene?

Ahora reflexionando en esas preguntas vamos a seguir y regresaremos a ese ejemplo más tarde.

 

Para hablar un poco sobre la fe vamos a ver unos ejemplos de fe:


Abraham: Hebreos 11:8,17

8Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba.(RV1960)
17Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía su unigénito, (RV1960)

(Pueden leer toda la historia de Abraham a partir del capítulo 12 de génesis.)

 

Abraham fue un hombre de fe y es uno de los padres de la fe. El salió a una tierra desconocido por fe, confiando en Dios. Abraham también ofreció su hijo, Isaac, como un sacrificio ante Dios creyendo que Dios le podía levantar. Isaac era el hijo prometido, Abraham sabía que Dios le había prometido descendientes por medio de Isaac. Abraham creyó la promesa de Dios, confió que El iba a cumplir con su palabra y si fuera necesario Dios levantara a Isaac de la muerte. Entonces Abraham confió y obedeció.

Abraham actuó motivado por su fe en Dios.

 

Otro ejemplo de fe, y uno de mis favoritos, es la de una mujer que llevaba doce años de sangrar: Marcos 5:24-29

24Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban. 25Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, 26y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, 27cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. 28Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva. 29Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote.

Imagínese esta señora…llevaba 12 AÑOS (¡!) enferma. Creo que después de doce años de buscar ser sana e intentar de todas formas conseguirlo y en vez de mejorar solo empeorar, uno perdería la esperanza. Tendría serias batallas con la desesperanza, la depresión, etc.

Pero esta mujer cuando oyó de Jesús, salió y peleo en la gran multitud hasta llegar a Cristo y toco su ropa. Ella no dejo que su pasado llena de esfuerzos y fracasos le detuviera, creo y actuó. Lo que es tan impresionante es que ella no pensó “si El grita sobre mi” o “si El me cubre con unos aceites y proclama una oración santa, voy a ser sana.”, no, lo que ella pensó fue “si solo toco Su manto, seré salva.” Y por su fe ella actuó y peleo hasta llegar a Jesús y tocar su manto. Por esa fe que actuó, ella recibió su sanidad.

 

Un ejemplo más es la de Ananías. Quizás sea un ejemplo de las que muchos no han oído pero es tan importante. Lo encontramos en Hechos 9:10-19

 

10Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor. 11Y el Señor le dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora, 12y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista. 13Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén; 14y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre. 15El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; 16porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre. 17Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. 18Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue bautizado. 19Y habiendo tomado alimento, recobró fuerzas. Y estuvo Saulo por algunos días con los discípulos que estaban en Damasco.

 

Dios le pidió a Ananías que orara por Saulo (luego pablo) que perseguía a la iglesia para matarlo. Ananías aun le dijo a Dios que conocía quien era Saulo (Como que Dios no se daba cuenta). Dios igual le mando y Ananías fue. Yo me imagino que era algo bien difícil hacer, pensando que Saulo mataba a los cristianos y que Ananías era uno de ellos. Pero Ananías fue en contra de su pensar y la lógica, tenía fe en Dios y en su perfecto plan. Confiaba que Dios sabía lo mejor.

 

¡La fe actúa! La fe promueve la acción. La fe produce la obediencia.

Santiago 2:14-17

14Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? 15Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, 16y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? 17Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.

 

La fe Sin obras no es fe, está muerta. Porque la fe produce acción.

 

Cuando en verdad creamos algo actuamos en base de eso. Igual como estos tres ejemplos creyeron y actuaron.

Si yo creo que va llover, voy a llevar un paraguas.

La fe produce obediencia como vimos en cada uno de estos ejemplos anteriores.

Cada vez que nosotros obedecemos estamos diciendo “Dios, yo creo en ti.”, “yo creo que moriste por mí.”,  “yo creo que un día me juzgaras.”, “yo creo que tu sabes mejor, tu eres Dios.” Demostramos que en verdad creemos por medio de la acción. Palabras son nada si no tienen acción que le sigue.

La fe produce acción.

 

 Regresando al ejemplo del manual de instrucción: Dios tiene todo un manual para nosotros (La Biblia), que nos instruye como vivir, que hacer,  cuales son las advertencias, etc., Igual que un manual de instrucciones. Hay veces en que el hasta nos hace un video, nos habla de una manera muy específica sobre nuestro caso en particular (revelación personal). Dios nos ha dado toda la instrucción necesaria, y si le buscamos nos indicara’ lo que El quiere y su voluntad para nosotros en especifico.

Yo amo el pastel de chocolate. Imagine que estoy fuera de la casa haciendo unos pedidos y mi papa me llama y me dice, te tengo un gran pedazo de pastel de chocolate en la casa. Sabiendo que hay algo bueno en la casa esperándome, yo me apuraría a llegar a la casa, viendo cómo puedo terminar más rápido, dejando cosas para otro día si fuera posible.  Estaría en espera para llegar a la casa y comer el pastel. Aun no perdería tiempo en el camino comprando otra cosa porque ya sé lo que me espera en la casa… Así es nuestra vida con Dios. Dios nos tiene tantas promesas, nos ha dejado todo un manual de cómo vivir, como llegar a su casa y las promesas que nos tiene. Pero muchas veces nos perdemos en el camino. O no queremos dejar algo que estamos haciendo. O compramos otra cosa en el camino y así nos desviamos. Aun algunos no creen que Dios les tiene algo en la casa, entonces simplemente no van.

Si en verdad creemos en El, en lo que hizo por nosotros y en lo que su palabra dice que hará, demostrémosle. Lo fe sin obras está muerta. La fe produce acción. Cuando le obedecemos le estamos diciendo: “¡YO CREO!”. Pero cuando no le obedecemos le estamos diciendo: “Es mentira, no creo. Si lo digo,  pero es mentira. En verdad no creo en ti y lo que tu harás.”

Les dejo esta ultima desafío en las palabras de pablo: 2 Cor. 13:5

5Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados? (RV)

Evalúan sus corazones. ¿Hay algo en que no han obedecido? ¿Le han dicho al Señor, por medio de sus acciones, que en verdad no crean en El?